Adios a la magia
Ayer por la noche nos sobresaltaba la noticia de que Sergio Rodríguez tras 6 años de blanco, decidía saltar el charco y volverlo a intentar en la mejor liga del mundo, la NBA. Personalmente, me ha pillado por sorpresa. En cierto modo, todo el movimiento me cogió desprevenido, leyendo informaciones tanto en Twitter como en los diferentes medios online. No os voy a engañar, nunca me creo estas noticias hasta que no son contrastadas, pero viniendo desde Estados Unidos y de la misma fuente que daba la noticia de la llegada de Kevin Durant a los Golden State Warriors, no me permitía poner ninguna duda a la información. No os voy a ocultar que me ha molestado las formas de la salida del Chacho del Real Madrid. Hace apenas 48 horas en el “Media Day” de la selección, reconocía que “aún tengo dos años de contrato con el Real Madrid y quiero cumplirlos”. Esa información para que engañaros, me daba cierta tranquilidad, como las frases de Sergio Llull y Andrés Nocioni mostrando en público su más firme deseo de seguir sudando la camiseta blanca. Pero tras darle muchas vueltas y poniéndome en la piel del canario llegué a la solución más obvia.
El contrato que firmará (aún no se ha hecho oficial) el base tinerfeño es de 8 millones de dólares por un único año y en una de las franquicias menos capital económico en toda la NBA. Aunque “el roster” de los equipos NBA no se parece ahora en nada al que pueden tener cuando se inicie la temporada regular, Sergio tiene bastantes posibilidades de jugar muchos minutos en la mejor liga del mundo. Porque ese es el sueño del tinerfeño. Jugar minutos y ser importante en la NBA. Ya el poder pelear por el anillo de campeón seria el súmmum para un jugador que lo ha ganado TODO en Europa en apenas seis años.
En la afición del Real Madrid, la salida del Chacho deja tristeza. Se encuentran dolidos porque se marcha un bastión muy importante donde se sujeta una de las patas del Real Madrid actual desde que Pablo Laso es su primer entrenador. Se encuentran dolidos porque hace apenas 48 horas se encontraba feliz y con ganas de seguir dando magia por toda Europa con la camiseta del equipo blanco. Ahora el Real Madrid tiene dos meses por delante para encontrarle un sustituto, alguien que ocupe sus minutos en cancha, ya que buscar a un jugador parecido ahora mismo parece imposible.
Además, con la baja del tinerfeño y la más que segura de Willy Hernangómez, la plantilla madridista se encuentra con apenas 3 jugadores españoles en su primera plantilla al que hay que sumar a Luka Doncic como jugador vinculado para sumar los 4 jugadores mínimos para cumplir los cupos de jugadores nacionales en la Liga Endesa. Estaremos pues a expensas de movimientos en los despachos de los directivos madridistas.
En lo personal, desear todo lo mejor a Sergio Rodríguez en la NBA. Es verdad que quizá Philadelphia no vaya a ser la franquicia que le dé esta próxima temporada demasiadas alegrías en victorias pero estoy convencido de que lo que el Chacho quiere conseguir, es ganarse al entorno bien entendido de Estados Unidos, entrenadores, jugadores, periodistas y quién sabe si a más de algún General Manager que se esté pensando en ofrecerle un suculento contrato para acompañar, quien sabe a las grandes estrellas de la NBA. Sergio Rodríguez era feliz en el Real Madrid, pero ahora va a cumplir un sueño y quiere disfrutarlo… aunque aquí en Madrid le echaremos muchísimo de menos. Gracias Sergio por estos 6 años aportando magia y ayudando al club a conseguir 12 títulos (3 Supercopas ACB, 3 Ligas Endesa, 4 Copas del Rey, 1 Euroliga y 1 Copa Intercontinental) en apenas 5 años.