Euroliga Jornada 24 Real Madrid 83 Fenerbahce 86

El maldito triple

Cargando...

El Real Madrid volvió a ceder en un partido decisivo para su posible clasificación entre los cuatro primeros, al término de la liga regular. Un enorme 65% en triples - con 20 intentos - del Fenerbahce, rompe las ilusiones de los de Pablo Laso, qjue están a una victoria del deseado cuarto puesto final.

Realmadrid.com Antonio Villalba Realmadrid.com Antonio Villalba Realmadrid.com Antonio Villalba Realmadrid.com Antonio Villalba Realmadrid.com Antonio Villalba Realmadrid.com Antonio Villalba Realmadrid.com Antonio Villalba Realmadrid.com Antonio Villalba

clorin 1200 200

Que bonita se está poniendo la Euroliga. A lo ya vivido el año pasado, esta temporada se suma que los ocho equipos que ahora mismo tienen opciones de clasificarse, desconocen a falta de 6 jornadas, cual ser su clasificación final. Ni más ni menos. Pero no solo eso, además los cruces fratricidas en estas jornadas, no te clasifica directamente ganando, ni tampoco te hunde perdiendo. Algo que echa por tierra a aquellos periodistas – conozco sus nombres, pero prefiero callármelos – que dudaban de la igualdad y la competitividad de esta competición. Quizás para ellos vaya dirigido este bloque de previa, que miraban como poco interesante el sprint final de la liga regular. Y allí donde nos encontramos, el Real Madrid se jugaba ante el Fenerbahce, la posibilidad de estabilizarse en la cuarta posición, algo que ya había conquistado el viernes pasado, tras asaltar el Palau Blaugrana. Además, las derrotas de Panathinaikos y Khimki, podrían dejar a Zalgiris como único rival para esa cuarta posición y dejar atrás a Fenerbahce. Pero esta competición es lo que tiene. Son 16 equipos cuyo objetivo es clasificarse entre los 8 mejores conjuntos del continente y no dar tanto la sorpresa de conquistar el título en la Final Four.

La victoria anoche era muy necesaria que por ello, me sorprendía el quinteto inicial de Pablo Laso. Campazzo seguía siendo titular, las torres Randolph y Tavares, me siguen pareciendo un buen complemento de inicio para alejar a los contrarios de la zona, pero la entrada de Jaycee Carroll y Santiago Yusta en el quinteto, me sorprendía. No por su calidad y talento, que les sobra, sino porque con este quinteto, nadie podría abastecer de balones al juego interior de manera clara. También era muy importante la victoria para Fenerbahce, igualado a victorias con los blancos y que no iban a dejar que el Real Madrid realizase su juego. Por tanto, parecía algo lógico el 2-7 del minuto 3 de partido, con 3 pérdidas de balón por parte madridista que no había anotado aun en tiro de campo. Ese hecho, desesperó a Pablo Laso, que sentó a Yusta y Campazzo para dar entrada a Doncic y Jeff Taylor. Pero no parecía resolver el problema que James Nunnally estaba provocando en la defensa blanca, con 8 puntos casi consecutivos para colocar un duro 2-12 en el minuto 4. Y es que el actual campeón de europa, dominaba todas las acciones del partido, con un 2-14 en el minuto 5 de encuentro, con un Real Madrid negado en ataque, no solo por no anotar, sino tampoco por lanzar a canasta. Solo 4 tiros realizados y 5 pérdidas de balón era el pobre bagaje del equipo de Pablo Laso, que ya había sustituido su pareja interior titular, por la pareja interior titular, del año pasado, Felipe Reyes y Gustavo Ayón. Pero para sorpresa de quien escribe, el Real Madrid comenzó a remontar, no a base de buen juego, sino a base de lanzamientos de tiros libres. Hasta un 12/15 realizaron los blancos en el primer cuarto, con las 11 faltas personales sancionadas al club turco, precisamente, uno de los sponsors oficiales de la competición. Gracias a ello, el Real Madrid consiguió un parcial de 16-6 en 4 minutos, para llegar al final del primer cuarto igualado a 20. Si, así es. 12 de los 20 puntos madridistas, fueron conseguidos por el tiro libre, tras un 3/10 en tiros de campo y 7 pérdidas de balón. No podíamos destacar nada del Real Madrid, salvo los 5 minutos de Ayón que volvió a brillar con 3 puntos y 3 rebotes.

El comienzo del segundo cuarto, ya se parecía más a un partido de baloncesto, con un Real Madrid mucho más engranado, realizando jugadas que desgraciadamente no terminaban en canastas, todo lo contrario, ocurría en las filas de Fenerbahce que sumaba de 3 en 3 gracias a espectacular acierto desde el triple 5/7 en el segundo cuarto que maniataba todas las intentonas de los jugadores madridistas para remontar. Parcial de 11-12 en 5 minutos, con los 12 puntos de los turcos, conseguidos a base de jugadas de 3 puntos, que desesperaban a los aficionados madridistas. Los blancos aumentaban su intensidad defensiva para ponerse por primera vez por delante en el marcador 33-32 en el minuto 16, tras haber conquistado un parcial de 31-18 en 8 minutos de juego. Pero en cambio, el triple no era el mejor aliado para los blancos que contaban con un pobre 3/9 al descanso. Y es que, pese al buen encuentro en anotación del base de 19 años – 12 puntos y 4 asistencias al descanso – el Real Madrid, parecía no disponer de base, es decir, de no tener un manejador de juego, de sistemas. Echaba en falta una serie de jugadas donde se moviese el balón con avidez. Las pobres 7 asistencias – 4 de Luka – me parecían escasas, aunque no se podía pedir mucho más con un escaso 40% en tiros de campo. Fenerbahce sin embargo, contaba con un 50% de acierto, pero gracias al maravilloso 70% en triples, que igualaba de alguna manera, el curioso 20/24 en tiros libres que llevaba el Real Madrid en apenas 20 minutos. Curioso porque las faltas le protegían con 10 sancionadas por 19 recibidas, ante un rival protegido por la competición. Pero los blancos habían recuperado el ritmo de partido. Un parcial de 7-2, dejaba a los blancos 39-34 en el minuto 18 con los jugadores interiores cumpliendo con Ayón y Felipe promediando cerca a los 10 de valoración. Pero como si de un punto de inflexión se tratase, un robo de Randolph, provocó un triple de Bobby Dixon desde su campo que cambió el desarrollo del partido. Los turcos volvieron a la senda de los triples donde solo Sloukas y Wanamaker llevaban un 0/3, mientras sus compañeros llevaban un escandaloso 7/7. Pero los blancos se llevaban la ventaja al final de la primera parte con un gran Doncic con sus 12 puntos. Los 7 rebotes en ataque y las 0 pérdidas en este cuarto, apoyaban la teoría de que tendríamos partido nuevo en la segunda parte tras el 45-40 del descanso.

Pero el paso por vestuarios, no enfrió la muñeca de Fenerbahce que conseguía anotar dos triples en menos de dos minutos para estrechar el marcador, conteniendo los intentos de un renacido Anthony Randolph que conseguía 5 puntos consecutivos para seguir manteniendo al Real Madrid por delante en el marcador. Pero como decíamos al principio, la victoria era muy importante para ambos equipos, y Fenerbahce no iba a ser menos con un Luigi Datome espectacular con 17 puntos y el crecimiento de Kostas Solukas. Y es que el base griego, no había anotado en el partido – al igual que Brad Wanamaker – pero él solito, se dedicó a incendiar el partido. Continuos cambios de dos enormes plantillas que seguían igualados 56-56 minuto 25. Pero el baloncesto sabe de calidad, pero gana el más acertado, y por tanto el 10/14 en triples de Fenerbahce, les daba una enorme ventaja. El Real Madrid seguía peleando, esta vez con Gustavo Ayón – la mejor noticia del partido del Real Madrid – de estandarte. El mexicano sumaba 9 puntos y 4 rebotes en 15 minutos, números espectaculares. El partido llegaba a un momento de anotación extrema, con los dos equipos aumentando sus porcentajes, con un Solukas fundamental con 10 puntos con dos triples, que se sumaban a la fiesta del 4/5 en triples solo en el tercer cuarto, para anotar hasta 28 puntos en este cuarto.  Por parte del Real Madrid, Jaycee Carroll con 10 puntos, cogía el testigo de Luka Doncic, inédito en este tercer cuarto, para afrontar con garantías el último cuarto. Como dato curioso, Fenerbahce se mantenía en su línea con el triple – 4/5 en tercer cuarto – 11/15 al final del tercer cuarto, mientras que el Real Madrid - 20/24 tiros libres al descanso – solo hizo 2/4 en el tercer cuarto. Ello provocaba la remontada de Fenerbahce, que llegaba con ventaja al último cuarto 65-68.

La necesidad de la cuarta plaza empezaba a notarse en las acciones de ambos equipos. Las defensas empezaban a ganar terreno en los ataques, donde los pequeños detalles decantarían el partido a cualquiera de los dos equipos. Por ello era entendible el 4-5 de parcial en cuatro minutos, donde los blancos seguían teniendo el triple como su principal problema con 5/16 en 35 minutos, a años luz del 63% de Feberbahce, con su 12/19. Al Real Madrid, sin Luka Doncic en pista, le costaba horrores anotar y notaba como se le escapaba el tiempo con el 71-75 en el minuto 35. Todo esfuerzo del Real Madrid, era contestado por el Fenerbahce, con un Sloukas  -20 puntos, todos en la segunda parte – que hizo suyo el partido, algo que no pudieron conseguir ninguno de los bases madridistas, que vieron como la épica, anoche no estuvo de su lado y no pudieron remontar el partido. La épica no era otra que refrescar su famosa defensa 1-2-2 presionante y colocarse dentro de partido en el último minuto. Pero Fenerbahce anoche, estaba de dulce. Su 6/10 en triples en la segunda parte, desfondó al Real Madrid, que buscaba el mismo apoyo arbitral de la primera parte, que lógicamente, había ya desaparecido. El tiempo se le consumió a un Real Madrid que, nuevamente como en la final de la Copa del Rey o previamente contra Olympiacos, tuvo la última ocasión para ganar el partido.

Una derrota dura de digerir, puesto que la victoria hubiese supuesto un pequeño colchón con la quinta plaza e incluso poder soñar con la tercera en un futuro. Pero este calendario, estos resultados, me están dando a entender, lo mucho que vamos a disfrutar de los cruces de cuartos de final, donde quizás CSKA Moscú, Olympiacos y Fenerbahce, parecen rozar con sus dedos la Final Four. Pero lo bonito de esta competición, es que en las próximas 6 jornadas, pueden pasar de todo…. Aunque algunos, ya pensasen que serían jornadas intrascendentes. El objetivo son los 8 primeros, la ilusión, estar entre los 4 primeros. No depende solo del Real Madrid, eso es lo bonito de este deporte llamado baloncesto.