Curras, el héroe inesperado en el Cerro del Espino

El Atlético de Madrid volvía por segunda vez esta temporada a su feudo en la Ciudad Deportiva de Majadahonda. En su primer partido ante el Real Madrid los de Fernando Torres perdieron por la mínima gracias a un solitario gol visitante. Los de ‘El Niño’ desarrollaron un juego de ataque caracterizado por las posesiones largas y laterales largos. Un juego bonito a la vista y cuyo desarrollo durante la primera mitad invitaba al optimismo ya que en los primeros veinte minutos probaron suerte hasta en seis ocasiones. La más clara fue de un Corral, el “veterano” del equipo a pesar de su aún juventud. Adrián se ha convertido en un líder dentro del verde tras dos temporadas en el Juvenil A donde la temporada pasada se alzó con la Liga en las últimas jornadas.

La posesión y las oportunidades no se traducían en goles, o dicho de otro modo la defensa del Leganés era muy sólida en las continuas estocadas rojiblancas. La táctica de los de Sergio Solis tenían la táctica clara: esperar al momento oportuno para la sacar un contraataque que pillara desprevenido a los locales. Esa ocasión llega a ser clara a la media hora de partido cuando un mal despeje de la zaga colchonera fue aprovechado por Sánchez para casi plantarse solo ante Iturbe, pero la fugaz y valiente intervención de Ibra con un tackling, que de haber salido mal le hubiera costado la roja, solventando con firmeza y seguridad la ocasión.

La segunda parte no tenía el guion con el que se desarrolló la primera. En la segunda mitad ambos equipos salieron de los vestuarios con el chip cambiado. Los de Torres metieron una marcha más al encuentro mientras que los de Solís y no sólo esperaban a la contra, sino que ahora se animaban a desarrollar un ataque más completo, plantándole un tú a tú interesante al Atleti.

La primera ocasión sería para el Atleti tras un fantástico remate de cabeza de Ostos. El lateral se tiró en plancha ante la atónita mirada de la defensa, que nada podía hacer más allá de esperar que Garrido despejara el esférico. El Leganés pronto se olvidaría del susto y seguiría con su juego probando a Iturbe desde la frontal del área en tres ocasiones. Iturbe no tuvo mayores sustos más allá de los balones colgados desde las bandas. El partido parecía condenado al empate, pero Curras se convirtió en el héroe inesperado a falta de diez minutos del pitido. El delantero había salido en sustitución Vilán en el 45. Peleó cada duelo que protagonizó y al final el gol llegó de su bota tras una alargacion de un balón por alto de Fede que dejó al “14” sólo contra el portero. Gol. El marcador no se movería en los diez minutos que quedaban, pero el Leganés tiró de corazón para intentar el empate. Al final el Atleti terminó pidiendo la hora al colegiado.

Ficha técnica