El Pinto se queda con la miel en los labios
Empate a dos tantos entre dos conjuntos que lucharán por no descender de categoría. Se adelantó el Adarve, remontó el Pinto y en el 93’ César logró la igualada
Partido vital para uno y otro conjunto. En la tabla, cinco puntos los locales y seis los visitantes antes de disputarse el encuentro. Los dos ocupando una de las posiciones que hace descender de categoría. Sí, es cierto que aún no hemos cumplido ni un tercio de liga, pero la necesidad empieza a apretar… Y hoy no iba a ser menos.
Con algo de retraso comenzó el partido debido a un problema con las redes de ambas porterías. Y a los 35 segundos Rubio tuvo el primer acercamiento para los locales. Parecía que el Adarve iría desde el minuto uno a por el partido, pero nada más lejos de la realidad. Fue un espejismo. Fue el Pinto el que, poco a poco, consiguió que se jugara en campo local estos primeros minutos. Muy activo estuvo Anderson, del Pinto y ex del Canillas la temporada pasada, quien dispuso de tres ocasiones en apenas dos minutos. Clara fue la última de ellas. Un disparo potente y bajo que, tocando mínimamente en alguno de los allí presentes, envió a córner Juárez con una gran mano. Lo siguió otro chut de Lolo que también respondió bien el meta local.
“Nos están ganando todos los duelos” se le oía desde la banda contraria al míster local, Borja Bardera. No le faltaba razón. El Pinto de Mario Otero estaba varias marchas por encima en cuanto a ganas e intensidad. Un tiro bastante manso de Talavera para los locales y un carrerón de área a área de Lolo para los visitantes fue lo más cercano de romper el marcador en los minutos siguientes.
Haciendo bastante menos que su rival, el Adarve fue quien logró ese gol tan ansiado. Esto es Ganapanes, y si algo tiene este campo es que los saques de banda en zona de tres cuartos en adelante son un córner más. De esta forma, Chinchu peinó un balón que le cayó a Talavera. El ex del San Fernando esta vez no perdonó y empaló el balón como si no hubiera un mañana. Y a los dos minutos pudo Pepe hacer el segundo, pero Sandro anduvo rápido para salir a tapar su chut.
Parecía que se iba a ir el partido al descanso cuando el Pinto tuvo las ocasiones más claras de todo el encuentro. No fue ninguna gol, pero no les habría resultado extraño a los allí presentes que hubiera sido al menos uno. Juárez contra el mundo. Primero se sacó de la manga una palomita a mano cambiada a tiro de Trujillo que envió a saque de esquina. De ese córner, el Pinto remató al larguero y, en una segunda oportunidad, otra mano salvadora de Juárez. De nuevo otro córner, donde Chinchu sacó el balón bajo la línea. Al descanso, 1-0.
La vuelta de los vestuarios no cambió el sino del partido en cuanto a dominio, pero sí en cuanto al resultado. En dos minutos remontó el club pinteño. Y ambos goles en jugadas y situaciones muy similares, prácticamente idénticas. En el primero, Trujillo combinó con sus compañeros, y aprovechó el último rechace para entrar al área y cruzarla al palo largo. Un minuto después, Anderson hizo casi lo mismo, juntando paredes para presentarse en una zona muy próxima a la de Trujillo en el primer tanto, y cruzó el esférico hasta que lo detuvo la red.
Y no cayó el tercero poco después porque Juárez volvió a ser clave, saliendo a tapar el disparo de Rober. El meta fue, de lejos, el mejor de los lobos. Probablemente, si no es por él esta tarde, el resultado hubiera sido mucho mayor. Una falta muy potente lanzada por Duro, que envió a córner el omnipresente de hoy Juárez, y un cabezazo de Albalat que cruzó demasiado volvieron a ser oportunidades de gol claras para que el Pinto lograra el tercero.
Desde esta remontada y las ocasiones que le sucedieron, el Pinto estaba más que cómodo en el partido. No le llegaban a puerta, mientras que parecía que ellos terminarían con ese tercer gol, como pudo ser con otro tiro de Alfonso. Por su parte, el Adarve estaba grogui después de los dos zarpazos de los visitantes, hoy vestidos de verde pistacho y blanco. Imprecisos, desganados, y con más corazón que cabeza en muchas jugadas.
Según se iban acercando esos momentos finales, se invirtieron las tornas. Los lobeznos, sin controlar el juego, se volcaron arriba. Metieron toda la carne en el asador, llegando a jugar con todas las bazas ofensivas del banquillo. Mario Otero decidió cambiar a defensa de cinco, con tres centrales y dos carrileros para, al menos, no encajar. Ocasiones continuadas en estos momentos fueron las de Rubio, Talavera y Chinchu. Pero sería el capitán, César Escriba, quien lograra ese gol a la épica. Minuto 93, córner enviado largo que Chinchu devuelve al primer palo, Talavera hace un intento de chilena que termina siendo una asistencia y César, que andaba por ahí una vez que le había pasado el balón, no lo desaprovecha, desatando la locura en Ganapanes.
Finalizó el encuentro con ese empate que a ninguno de los entrenadores dejó satisfecho. Otero por perder dos puntos a falta de dos minutos, y Bardera por el juego que su equipo había desplegado. La siguiente jornada el Adarve volverá a jugar en casa ante el Burgos y el Pinto recibirá al Extremadura.