Moha, la sonrisa del drama
Hay historias e historias. La de Moha, sin duda, es una de las que nos llena el alma poder contarla.
Y un día, cansado de la situación política y social que vivía en su Costa de Marfil natal, Mohamed Bamba decidió hacer las maletas y emprender su camino a Europa. ¿Su sueño? Ser futbolista y poder darle una vida mejor a su madre. Cruzó el desierto alternando tramos a pie con trayectos en coche, sin tiempo para lamentarse, sin tiempo para mirar atrás. Llegó a España y encontró la AD Alcobendas-Levitt, lo que hoy es su lugar en el mundo. Entrenó sin descanso hasta tener ficha, un momento que parecía que no iba a llegar. Hoy destaca cabalgando las bandas derechas de nuestra querida DH5, en la que debutó con gol, y ejerce de utillero del primer equipo alcobendense. Sus condiciones, y sobre todas las cosas su carisma y forma de ser, le han hecho convertirse en un pilar básico no solo del vestuario juvenil, si no del club.
Una historia de Irene Yustres y Fernando Beltrán.