Pablo Margallo da el salto al Real Madrid
El joven mediapunta se una a la lista de jugaroes del Diocesano que refuerzan la poderosa entidad blanca, como Jorge Franco 'Burgui', que hoy en día milita en Primera División
Tras una temporada excelente y varias pruebas con el conjunto blanco, el joven jugador del CD Diocesano abandona la que ha sido su casa, y en la que se ha formado desde benjamín en el mundo del fútbol. El mediapunta llega para reforzar uno de los mejores filiales del panorama nacional, desde donde intentará seguir creciendo para llegar lo más lejos posible.
Con 19 años ha conseguido en la última temporada 18 goles, siendo el líder del Diocesano en un año donde no han pasado demasiados apuros para salvarse, han servido para llamar la atención del equipo blanco que siempre lo ha tenido en el punto de mira. Hasta en tres ocasiones en esta temporada ha estado realizando diferentes pruebas hasta corroborar su fichaje por el Real Madrid, donde para empezar, realizará la pretemporada con el Castilla.
Pablo Margallo es un mediapunta que al que le encanta jugar justo por detrás de los delanteros, desde donde crea peligro constante gracias a su gran pegada y rapidez de movimiento para superar defensas. Así lo han sufrido las líneas de algunos de los equipos del grupo V de División de Honor. Su capacidad para jugar rápido con sus compañeros de arriba como Iván Fernández también es una de sus grandes virtudes.
No es la primera vez que el Diocesano sirve de fábrica de talentos para el conjunto blanco, ya hace seis años Jorge Franco ‘Burgui’ dio el paso de jugar con el conjunto blanco, jugando dos temporadas en el Castilla, pasó por el Espanyol, hasta llegar actualmente al Alavés. Otro caso fue el de Ismael Cerro, jugador actual del Sporting ‘B’. Las relaciones entre Diocesano y Real Madrid son buenas y su acuerdo de colaboración hace pensar que, Margallo no será la última perla exportada por el conjunto colegial.
Finalizada su etapa como juvenil con un gran éxito (perteneciente al once ideal de DH 5 y segundo en el MVP), a Pablo Margallo se le presenta una página en blanco en su futuro, la más dura que le toca por escribir, pero también la más ilusionante y donde las predicciones apuntan a que, con un poco de suerte, no será la última vez que se hable del joven cacereño, porque talento le sobra.
