Salim salva los muebles en Ganapanes

El Vereda de Ganapanes volvía a oler a fútbol y a DH5. Tras una grandísima temporada pasada, el Unión Adarve recibía al vigente campeón de liga, el Atlético de Madrid. No podía haber mejor puesta de gala para el barrio del Pilar un año más.

 

El partido comenzó con ambos equipos muy intensos, especialmente el conjunto local, que con cada pérdida del rival gritaban para alentarse. Sin embargo, pasados esos diez primeros minutos, el juego empezó a ser cada vez más espeso con alguna que otra interrupción.

 

Prueba de esa lentitud de juego era la ausencia de ocasiones de gol. Dos intentos de balón a la espalda desde la defensa atlética a Vilán, que no logró materializar gracias a la defensa local, y un disparo de Navarro para acabar jugada fue lo más destacado.

 

Los últimos compases fueron de dominio rojinegro, a pesar de que la mejor oportunidad fue para el Atleti. Vilán pegó al balón desde fuera del área, este fue desviado por uno de los lobos y Christo tuvo que meter la mano para que no se colara en la red. Al descanso, 0-0.

 

La segunda parte fue mucho más bonita para el espectador. Ya en el 47’ avisó Diego con un disparo a la media vuelta que, de ir a portería, Iturbe no hubiera logrado alcanzar. Posteriormente, Lucas Pérez pego un zapatazo desde lejos que hizo aplicarse a Christo con una palomita. Además, en el córner posterior, Boñar remató solo y se le marchó alto.

 

Del minuto 50 al 65, el Atleti tuvo grandes momentos de juego, en los que dispuso de un lanzamiento de falta muy peligroso que se estrelló en la barrera, y tres remates de Barrios, Vilán e Ilias.

 

La larga pausa de hidratación, a la que se sumó un pique entre miembros de ambos banquillos, ralentizó esos minutos de juego rápido con ocasiones. Pero en el 75’ el Adarve pudo hacer el primer gol del partido. Garci salió con todo desde la defensa y, por corazón e insistencia, llegó a la línea de fondo y centró al corazón del área. Ochan, que había entrado al campo hacía no mucho tiempo, remató de cabeza sin marca en el borde del área chica. Su cabezazo de marchó alto con Iturbe totalmente vendido.

 

Otro pique entre el banquillo de Ricardo Ortega (con Fernando Torres y Gabi Fernández como caras reconocibles) con el de Borja Bardera por las pérdidas de tiempo locales hacía prever que el añadido no iba a ser escaso. 

 

Ya en el añadido, el Adarve se encerró atrás buscando el empate mientras que al Atlético no le servía tras perder en la primera jornada en el derbi. Finalmente, Navarro llegó a la línea de fondo y dio un pase de la muerte que Salim, medio de tacón y medio de espuela, mandó a la red por el segundo palo.

 

El partido concluyó en el minuto 99 con los colchoneros eufóricos y los lobos devastados. Hubo más piques finalizado el partido que no deberían darse.