Un gran Rayo Alcobendas manda al Diocesano a la UCI
Un gran arranque del Rayo Alcobendas fue más que suficiente para doblegar a un Diocesano que fue incapaz de contener al cuadro madrileño. Manu, con un hat-trick, fue el mejor jugador sobre el campo en un encuentro que deja muy tocado al equipo colegial.
Comenzó apretando el Rayo Alcobendas, en una declaración de intenciones y un augurio de lo que sería el partido disputado en el campo número 1 de los Federativos de Cáceres. No se habían cumplido los diez minutos de juego cuando Manu, en una gran jugada individual, se deshizo de su par en el pico izquierdo del área y definió al palo más alejado de Yago, que nada pudo hacer para evitar el primer tanto de los chicos de Rubén Bullón. Apenas dos minutos después, pudo doblar su ventaja el equipo madrileño, pero Yago, en un alarde de reflejos, repelió el disparo de Arribas desde el punto de penalti. Sin apenas tiempo para respirar, el Diocesano vio cómo el Rayo Alcobendas volvió a perdonar una ocasión clara de gol, tras regatear Carva al meta colegial y estrellar su disparo en el lateral de la red. Pasado el cuarto de hora de juego, un gran centro raso de Arribas conectó con Carva en el punto de penalti, que definió de primeras para batir nuevamente a un Yago que solo podía ver a su equipo deslavazado y totalmente superado en todas las líneas. No hizo falta esperar demasiado para volver a ver un tanto visitante, pues en el minuto 21, Manu firmó su doblete particular tras encontrar un balón suelto dentro del área y definir por bajo a la derecha de Yago.
El Diocesano no bajó del todo los brazos, subió líneas y aumentó su presión en campo rival, y poco después de la media hora de juego, Silgado pudo marcar tras recortar a un defensor madrileño, pero su disparo raso fue perfectamente taponado por Raúl Tejero. Fue en las postrimerías de la primera mitad cuando el Diocesano recortó diferencias y alimentó las esperanzas de meterse nuevamente en un partido que tomó tintes de pesadilla muy rápido: gran presión de Bote en área rival, recuperación y pase atrás para que Salva, sin oposición, firmara el 1-3 que cerró el primer acto del partido.
Ya en el segundo tiempo, los jugadores de Jorge Sánchez trataron de seguir ganando presencia ofensiva y mayor posesión de balón, y las ocasiones del Rayo Alcobendas se redujeron drásticamente. Silgado pudo hacer el 2-3 pasado el cuarto de hora de la segunda mitad, pero su volea se estrelló en el lateral de la red en la jugada inmediatamente anterior al cuarto gol madrileño. Disparó Carva desde dentro del área, rechazó Yago y Manu recogió el balón suelto para empujar al fondo de la red y certificar así su hat trick particular. Tras el jarro de agua fría que supuso el gol de la sentencia, el Diocesano pareció aceptar su destino y el partido perdió fuelle, algo que no impidió a Carva firmar el 1-5 definitivo antes del pitido final.
Con la victoria, el Rayo Alcobendas se sitúa cuarto en la tabla con 32 puntos, mientras que el Dioce comparte el farolillo rojo con el Badajoz, ambos con 11 unidades. La próxima jornada, los madrileños recibirán al Atlético de Madrid, y los cacereños visitarán León para medirse a la Cultural Leonesa.