RSD Alcalá: Resultado bueno, pero pudo y debió ser mejor
Partido completamente dominado por el Alcalá, que consiguió un buen resultado, pero corto
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Paso al frente de la RSD Alcalá en su intento de regreso a la división de Bronce. Los rojillos consiguieron ganar y sobre todo dejar su puerta a cero, lo que les da una gran ventaja de cara a la vuelta a disputar el próximo sábado en la capital de Navarra.
El partido estuvo totalmente controlado por los rojillos. Desde el pitido inicial, los alcalaínos se hicieron con el control del balón, y mandaron sobre el inmaculado césped de El Val, que pesó sobre manera. Y es que el equipo pamplonica demostró tener auténtico pánico a las grandes dimensiones del vetusto estadio rojillo, puesto que en todo momento se metieron atrás, pensando única y exclusivamente en defender su portería. El miedo a que el partido se les hiciera largo el partido, estuvo siempre presente en las cabezas de los jugadores del San Juan, que apenas pasaban del centro del campo. Enfrente, los alcalaínos tampoco tenían mucha prisa, y tocaban con mimo el balón buscando algún espacio por el que colarse para asestar un golpe a su rival.
Y a la primera que pudieron, se adelantaron los cervantinos. Mediado el primer tiempo, Merchán realizó un gran cambio de orientación de izquierda a derecha, en dirección Castiella. Por la banda diestra, el delantero pamplonica del Alcalá controló el balón, se plantó solo ante Orbaiz, y lo fusiló con un gran disparo cruzado al segundo palo. Imparable para el cancerbero.
El gol hacía prever que se iba a repetir la situación vista tantas y tantas veces este curso a orillas del Henares: una vez el Alcalá por delante, las piernas de sus futbolistas se sueltan, mareando y goleando al rival. Pero en esta ocasión no fue así. Los alcalaínos tenían el freno de mano echado ante la posible reacción del San Juan, que no llegó. De hecho, los forasteros se marcharon al descanso sin pisar el área rival.
El segundo tiempo fue muy similar. Nada más arrancar, el Alcalá tuvo varios acercamientos peligrosos, que no llegaron a finalizar, antes de que Xabi Mata, comenzara a mover el banquillo. El técnico visitante introdujo dos cambios, que lejos de reactivar a su equipo, lo reafirmó en su convicción: defender a toda costa. El resultado corto era un preciado botín para el equipo pamplonica, que seguía sin salir de su campo, y perdía todo el tiempo que podía. Enfrente el Alcalá seguía a lo suyo, domando el balón, buscando pacientemente el gol. Es más, tanto le estaba gustando el partido a Jorge Martín de San Pablo, que no agotó los cambios, haciendo el primero en el setenta y siete.
Aunque no fue un asedio, si tuvieron los rojillos opciones más que de sobra para sentenciar no solo el partido, sino también la eliminatoria. Sobre todo a balón parado, donde la aerolínea rojilla comandada por Rafa (dos muy claras) y Benítez, acompañados en esta ocasión por Gonzalo. Pero los remates de los futbolistas rojillos se marchaban directamente fuera, aunque con mucha intención pero por poco, y el marcador no se movió, dejando todavía abierta una eliminatoria, que salvo catástrofe, será de color madrileño.
