Caso Víctor Arteaga en Movistar Estudiantes, condenado al olvido
Maldonado le ha dado la espalda
Menos de un minuto y medio en los últimos tres partidos. Castigado y condenado al ostracismo, esa es la situación actual de un Víctor Arteaga que parece no contar para Salva Maldonado.
Casi de rebote, ese es el resumen de la llega de Víctor Arteaga a Movistar Estudiantes.
La nula adaptación de Alí Traoré hizo a Willy Villar mover ficha y rastrear en un mercado que estaba en las últimas allá por octubre de 2016. Surgió entonces la posibilidad de hacerse con el conquense, condenado al ostracismo en el UCAM Murcia por Óscar Quintana, que no opuso resistencia a su salida, los 212 centímetros del pivot cayeron en el Ramiro de Maeztu.
Le costó entrar en la dinámica, la apuesta por Traoré era fuerte y Arteaga, tercer pivot del equipo, contaba con los minutos justos. También es verdad que en las escasas oportunidades que tenía, dejaba detalles de su enorme calidad. De hecho, cuando el francés dejó de contar para Maldonado y hasta que fue cortado y se fichó a Ondrej Balvin, Victor contó con minutos de calidad. En definitiva, demostró poder tener espacio más que de sobra en un equipo como Movistar Estudiantes, que, además, le firmó un contrato de hasta 2019. Una apuesta clara.
Y manco no será Arteaga cuando acaba de entrar en la preselección de Scariolo para las Ventajas FIBA de noviembre, habiendo estado el pasado verano con la Selección B antes del Eurobasket, 8.5 puntos y 3.5 rebotes en apenas 11 minutos por partido.
Dicho esto, resulta que en Movistar Estudiantes no juega, no es que juegue poco, que lo hacía, es que lleva 01:13" en los últimos tres partidos. Y todo a causa de un minuto trágico en Sevilla, algo que le ha condenado, algo que ha hecho que Salva Maldonado no cuente con él, algo que ha hecho que Goran Suton forme en su posición, pese a dejar claro que no tiene capacidad, o que Savané, de 39 años, aplaste en minutos al manchego. No lo entiendo, de verdad.
¡Que aquello es Estudiantes! ¿Cuántos pivots españoles hay con la capacidad de juego de Arteaga? ¿Cuántos hay en Europa de 211 centímetros y su agilidad en el poste bajo? Pocos, muy pocos.
No hay peor ciego que el que no quiere ver, y en la Calle Serrano parece haber alguno. No es justo ver la vehemencia con la que Maldonado castiga los errores de Arteaga y, al mismo tiempo, ver la facilidad con la que perdona los errores de sus vacas sagradas. Y Estudiantes, que tanto presume de sus valores, que tanto hace alarde de no estar en una situación boyante a nivel económico, debería plantearse alguna que otra cosa.
¿Por qué no juega un jugador que es un activo valiosísimo para el club? ¿Qué le está dando Maldonado al Estudiantes? De momento ya se ha ido Jaime Fernández; Edgar Vicedo termina contrato y su situación no es la mejor; Darío Brizuela tiene un año más y para qué hablar de la suya. Luego salen, y salen de aquella manera, criticados hasta la saciedad. A poco que juegue en verano llegarán ofertas por Víctor, y podría dejar dinero al club, algo indispensable dada la situación económica y la tesitura de los del Ramiro. ¿Por qué no es consecuente con esto la apuesta deportiva? ¿Para qué apostar por determinados perfiles y traer jugadores jóvenes como se ha hecho en el EBA si no hay un entrenador que los ponga?
Un dato, en los apenas 8 partidos que Víctor Arteaga ha jugado más de 15 minutos con Movistar Estudiantes, ha promediado 9.1 puntos, 5.3 rebotes y 11.3 de valoración y un magnífico 63.4% en tiros de campo.
Cierto jugador me dijo un día, "si le dejas, y le das confianza, este tío es mejor que Willy Hernángomez, tiene un talento descomunal", pero hay que dejarle.