Abalde Calidade
Con un palmeo final de Alberto Abalde, el Real Madrid consiguió matemáticamente el segundo puesto final de la Liga Endesa en un igualadísimo encuentro que se resolvió con 0.2 segundos. Partidazo de Sergio Llull con 21 puntos 5 asistencias y 23 de valoración en 21 minutos. Vince Poirier, Adam Hanga y Alberto Abalde fueron otros de los destacados en la séptima victoria consecutiva del Real Madrid en otro partido que rozaron los 100 en valoración.
Con el objetivo de la Final Four en el bolsillo, el Real Madrid buscaba conseguir una nueva opción matemática en la Liga Endesa. Y es que, tras la derrota de Valencia Basket, el Real Madrid tenía su primera opción de asegurar la segunda plaza en la Liga Regular, si venciese al Monbus Obradoiro en la tarde de ayer. No iba a ser fácil, porque si los blancos necesitaban de una victoria para amarrar el segundo puesto, donde los gallegos de vencer romperían cualquier opción de descenso pero que, perdiendo, seguiría metido en el lío junto a otros 5 equipos para 2 plazas, donde se encuentra metido nuestro Urbas Fuenlabrada. El Real Madrid aprovechaba su único partido de la semana tras haber hecho los deberes en Europa y tras vencer de forma clara el pasado domingo al Joventut Badalona. Rudy Fernández se quedaba en Madrid y de nuevo Jeff Taylor cerraba un roster que, de momento, no sufre de ninguna lesión importante. Dato imperativo para darle valor a las 7 victorias consecutivas que llevan los jugadores de Pablo Laso desde que vencieran en el WiZink Center a Río Breogán el pasado 17 de abril.
Monbus Obradoiro se jugaba mucho en este partido y contaba con seis jugadores con valoraciones superiores al 10, un dato que deja muy a las claras los hombres importantes del equipo de Moncho Fernández. Pablo Laso ya parece haber encontrado su quinteto inicial tipo con Nigel Williams-Goss en el base, Fabien Causeur y Adam Hanga en las alas y con Guerschon Yabusele y Edy Tavares en la pintura. Las intenciones de ambos equipos de cerrar sus aspiraciones fueron el acicate necesario para ver un fantástico inicio de partido con el 11-7 para Monbus Obradoiro en 3 minutos con 7 puntos anotados por Braydon Hobbs. Y es que Monbus Obradoiro encontró un gran acierto exterior con un 3/3 en triples para buscar la escapada ante un Real Madrid que no se quedaba a la zaga nuevamente con Adam Hanga como estrella, de igual manera que ante el Joventut Badalona. Sus 7 puntos en este cuarto ayudaron a que los blancos remontasen y se quedasen 18-13 en el minuto 7 de partido para Monbus Obradoiro. Pero este Real Madrid es diferente al que empezó la segunda vuelta allá en Febrero y empezó a remontar con jugadores de segunda unidad para remontar el partido y llevarse el primer parcial 21-23, tras un parcial de 3-10 en tres minutos, con puntos para Poirier y Alberto Abalde. Un primer cuarto espectacular donde Obradoiro se quedaba en un 4/6 en triples y el Real Madrid en un 7/10 en tiros de dos. De igual forma que últimamente, el Real Madrid conseguía un 56% en tiros de campo, con 23 puntos y 34 de valoración. Y con otro dato muy positivo, junto a las 5 asistencias del primer cuarto, apenas 3 pérdidas de balón con 3 recuperaciones y 3 tapones consumados, lo que supone un gran esfuerzo físico de los jugadores de Pablo Laso.
Partido muy anotador en el primer cuarto y que no iba a ser menos en el segundo acto, con el talento en rachado de Sergio Llull. Y es que el menorquín promedia dobles figuras en puntos y valoración en los cuatro últimos partidos disputados por los blancos. Pero el partido de ayer fue un torrente de anotación donde los locales recuperaban la delantera en el marcador con 11 puntos anotados en solo 3 minutos con el talento de Henry Ellenson. Y es que ahora Monbus Obradoiro tenía mejor mano en la pintura y tenía más posibilidades de conseguir puntos fáciles. Pero ni con esas, el equipo santiagués pudo despedazarse del Real Madrid que tuvo en Sergio Llull a su mejor hombre en el segundo cuarto. Porque suyos fueron dos de los tres triples que anotaba un mejorado Real Madrid para colocar el 35-38 en el minuto 15 de partido. Fue el momento en el que el partido se convirtió muy físico donde los árbitros decidieron parar más el juego permitiendo 13 tiros libres entre los dos equipos. Y de todo eso sobrevivió Monbus Obradoiro para recuperar el mando con un parcial de 8-2 en apenas 3 minutos, pero Sergio Llull decidió sacar toda su magia para realizar un segundo cuarto de ensueño con 12 puntos en 8 minutos para mantener al Real Madrid por delante 44-46 al final de la primera parte. Doce puntos de los 23 que anotaban los blancos en un segundo cuarto donde ambos equipos cerraron con un 8/16 en tiros de campo ya que también, Monbus Obradoiro llegaba a anotar 23 puntos en el segundo cuarto y continuaba echándole el aliento en la nuca al Real Madrid.
Y tras el descanso, llegaron los mejores minutos de Monbus Obradoiro que conseguía un parcial de 10-3 en menos de 3 minutos siendo nuevamente un puñal en la pintura anotando un 5/7 desde la zona en el tercer cuarto. Y tiene mucho mérito ese dato, puesto que el Real Madrid hasta 3 tapones al descanso. Además, le favorecía el trato arbitral en el juego físico que el entrenador Moncho Fernández diseñó el partido. Con todo ello y el crecimiento de Birutis que anotaba 5 puntos de sus 13 en el partido para llevar en volandas a su equipo hasta el 56-51 para Monbus Obradoiro en el minuto 25. La única diferencia en el equipo gallego era el 2/7 en triples que afeaba su buen 7/13 en triples de la primera parte. Pero su ventaja no iba más allá puesto que el Real Madrid se mantenía a raya con la aportación de Alberto Abalde y de Guerschon Yabusele. Empate a 58 con poco más de dos minutos por jugar del tercer cuarto y nuevamente el barrullo arbitral permitía anotar a los gallegos desde los tiros libres y a los madrileños en jugadas personales como dice la única asistencia dada por los blancos en el tercer cuarto. Aun con todo esto, nos encontramos en el cuarto menos anotador del partido y que permitió a Monbus Obradoiro liderar el partido con el 63-62 al final del tercer cuarto. 16 puntos, 1 asistencia y 0/0 en tiros libres de un flojo – después de haber visto los 7 partidos anteriores – Real Madrid que conseguía un 47% en tiros de campo pero perdía la batalla en el juego interior. Todo quedaba a expensas de lo que ocurriría en el último cuarto donde, como suele ocurrir, cualquier acción podía ser decisiva. Desde un triple de Jeff Taylor a varios “tapones ilegales” de Vincent Poirier. Tanto es así que el partido se convirtió en un columpio de resultados donde Phil Scrubbs y Braydon Hobbs animaban el ataque de Monbus Obradoiro mientras que en el Real Madrid apareció el talento de Vincent Poirier que supo encontrar hueco en la zona y donde, sorprendentemente, los árbitros ahora sí pitaban las faltas personales sobre el pívot francés. Y es que el de Clamart, anotaba 5 de sus 7 puntos desde el tiro libre gracias también a sus 3 rebotes ofensivos. Con todo ello, el Real Madrid parecía tener controlado el partido tras un parcial de 2-9 que dejaban el partido en 77-84 para el Real Madrid en el minuto 36 de partido. Pero nada más lejos de la realidad, Monbus Obradoiro no se rindió y devolvió el parcial de 9-0 para ponerse por delante a falta de minuto y medio. Pero tras una canasta de Llull y un tiro libre de Hanga, llegábamos a falta de 10 segundos 86-87 para el Real Madrid. Pelota para Monbus Obradoiro donde Kassius Robertson atrae a toda la defensa para asistir a Birutis que libre de marca machaca y pone el 88-87 a falta de 6 segundos. Pero el Real Madrid no quiso cerrar su racha de victorias y en una acción a toda cancha, Sergio Llull lanza esquinado un tiro que se queda corto, pero que se encuentra Alberto Abalde que la mete a tabla a solo 2 décimas del final del partido y le da al Real Madrid su séptima victoria consecutiva. Una acción que decidió un partido que pudo llevarse cualquier equipo pero que una acción volvió a ser decisiva para el devenir del encuentro. Sergio Llull nuevamente fue el máximo anotador del partido con 21 puntos y 23 de valoración pero fue Vincent Poirier quien con 24 créditos fue el jugador más valorado de un partido que será siempre recordado por el palmeo de un ferrolano que juega en el Real Madrid, Alberto Abalde.