El Barça se lo pasó Bomba
Un maravilloso y acertado Barcelona Lassa, derrotó a un indeciso Real Madrid que aguantó 35 minutos del clásico, hasta que el 50% de acierto en el triple blaugrana, les dejó sin ideas. Campazzo y Tavares fueron los mejores en un Real Madrid, que volvió a contar con la baja de Sergio Llull, por segundo partdo consecutivo. Emotivo minuto de silencio por la muerte del padre de Juan Carlos Navarro.
Hubiese sido la mejor forma para culminar el clásico español. La merecida retirada de la camiseta de Juan Carlos Navarro en el Palau, se tuvo que suspender, por la repentina muerte de su padre en la madrugada de ayer- Desde Pobla FM, queremos transmitir toda nuestra fuerza y condolencias, al jugador catalán. Al menos su equipo, sí le quiso dar ese regalo, aunque fuese de una manera excesiva, llena de adrenalina, al limite de lo legal y convirtiendo el partido en un campo de batalla. Solo era la jornada 10 del campeonato, el vigésimo primer partido de la temporada, pero parecía el duelo final a muerte entre los dos grandes del baloncesto español. El FC Barcelona venía como líder de la Liga Endesa y sexto en la Euroliga. Su 14-5 de balance esta temporada, demostraba que su juego había vuelto. Quizás no esté al nivel de volver a ganar una liga o de meterse en la Final Four, pero los dos primeros meses de competición, nos demostraba que volvía a ser un rival a tener en cuenta esta temporada. En cambio, los más críticos empezaban a ver fisuras en el Real Madrid. Justamente, la derrota del pasado jueves en Atenas y una hipotética derrota en el clásico, harían ver fantasmas alrededor de la maquinaria madridista.
Segundo partido sin Sergio Llull y segunda derrota consecutiva. Sí, estamos en noviembre, pero muchos aficionados madridistas, ponen la voz de alarma al verse superados por todo un Olympiacos y Barcelona. Reconozco, haber visto esta semana pasada, los dos documentales de Real Madrid TV, “En el corazón de la Novena” de 2015 y “En el corazón de la Décima” de 2018. En ambos casos, recomiendo la charla pre partido de Pablo Laso, minutos antes de comenzar sendas finales, subrayando el esfuerzo que sus jugadores han hecho por llegar aquí, superando las lesiones. Y las críticas añadiría yo. Pues esas críticas volvieron a sobrevalorar las redes sociales tras la segunda derrota – tercera en 21 partidos – consecutiva del Real Madrid. Contra un FC Barcelona muy intenso desde el comienzo, con ya 4-0, 1 rebote ofensivo y 1 falta provocada en apenas 1 minuto de juego. Y esa intensidad funcionó de maravilla, presionando la subida de bola de Facundo Campazzo, hasta un 6-0 de inicio, frenado por un 0-4 en cuanto el argentino tenía vía libre para correr. El Real Madrid había frenado el eléctrico inicio del FC Barcelona 11-8 en el minuto 5, pese a los 6 puntos de Ante Tomic y los 5 rebotes ofensivos logrados por el conjunto catalán en ese espacio de tiempo. Pero la ofensiva blaugrana era total, con 15 lanzamientos a canasta en apenas 7 minutos y una prisión asfixiante, que solo pudo detener en dos ocasiones, Anthony Randolph con dos triples. A pesar del 61% de acierto en el tiro, el Real Madrid fue desbordado por el ataque blaugrana, quien a pesar de su 40% en tiros de campo, imponía su estilo de juego, frente a un Real Madrid, buscando devolver los golpes. Al final del primer cuarto, el Barça solo ganaba por 1, a pesar de haber lanzado hasta 7 tiros de campo más que los blancos.
Con un quinteto más bajo en cancha, mejoraba el juego del Real Madrid, pudiendo ofrecer un juego más rápido e intenso, para contestar al eléctrico estilo azulgrana. Un 4-14 de parcial en 5 minutos, colocaba un efímero 24-33 en el minuto 15. Parecía entonces, que cambiaba la dirección del viento, con un gran Gustavo Ayón quien hacía 7 puntos y 3 rebotes en este cuarto. Todo ello con Prepelic en cancha, como base suplente, dando minutos de descanso a Facundo Campazzo. Pero como dijimos anteriormente, el viento volvió a cambiar y los parones en el juego, además de las faltas personales – 9 de las 11 faltas sancionadas al Real Madrid, fueron de sus hombres altos – reforzó al cuadro blaugrana, que consiguió subir la intensidad en defensa, correr en ataque y remontar el partido con un parcial de 13-0 en 4 minutos, apoyados en un 8/8 en tiros libres. Ahora era el juego interior del FC Barcelona, quien dominaba el partido, con 9 puntos y 5 rebotes de Chris Singleton y los 7 puntos con 3 rebotes de Ante Tomic. A pesar de ello, el Real Madrid seguía en partido 39-36 al descanso, pese a no haber llegado a anotar 20 puntos en ninguno de los dos primeros cuartos.
El partido llegaba al descanso con muchos nervios y con tanganas protagonizadas por Ayón, Campazzo, Oriola y tristemente por el entrenador Pesic, que alimentaron al público a lanzar objetos a la cancha. Actos que no gustan ver y tener en un partido deportivo y más después de conocer el estado del fútbol argentino. El Real Madrid seguía en partido, pero el 4/16 en triples y los 13 rebotes – 0 ofensivos – era una cuestión a mejorar en la segunda mitad, algo que ya el FC Barcelona preparaba en el tiro exterior consiguiendo un envidiable 8/15 en la segunda parte. La salida de vestuarios dotó de energía extra al FC Barcelona, quien nuevamente bloqueó los intentos de contrataques del Real Madrid, que buscaron los interminables brazos de Edy Tavares para volver a remontar el partido y colocarse por delante en el marcador 44-48 en el minuto 25, gracias a 4 puntos del caboverdiano y 2 triples consecutivos de Jaycee Carroll quien por fin apareció en el partido. Pero sendos triples no fueron secundados por sus compañeros y de nuevo el físico del Barcelona, volvía a amedrantar el juego de los de Laso, que seguían estando en partido gracias al 50% en tiros de campo y las 19 asistencias realizadas, pero incapaz de lograr igualar el empuje azulgrana que con un 3/5 en triples y 19 puntos anotados en 4 minutos, cerraban el tercer cuarto 63-59 para los blaugranas.
Adam Hanga volvía a tener un partido imperial, como siempre que juega con el Real Madrid. El húngaro acababa con 12 puntos en 16 minutos, números inalcanzables para Rudy Fernández quien no jugaría nada en la segunda parte. Dato curioso, puesto el mallorquín parecía clave para abrir la férrea defensa blaugrana. El Real Madrid lo intentó en el comienzo del último cuarto, pero sus ataques se convertían en pérdidas de balón – 7 en éste último cuarto – o en duras defensas blaugranas que cerraban cualquier intento de los blancos en anotar. En contra, los azulgranas veían el aro como una piscina y con un triple espectacular de Kyle Kuric, prácticamente sentenciaban el encuentro en el minuto 35, 74-64. Solo 5 puntos del Real Madrid que no conseguía igualar la intensidad del FC Barcelona, y que además solo contaba con la aportación de Jaycee Carroll, por encima de los 10 puntos. Fue el fin del partido, cuando el FC Barcelona decidió jugar a hacer sangre, a intentar resarcirse de la mala temporada el año anterior, viendo además los éxitos de su mayor rival. Fueron unos minutos de locura, donde equipo y afición blaugrana vivieron su momento de éxtasis. Tanto que el equipo tuvo que volver a salir a la cancha tras el partido, como si de un título se tratase. Pero el FC Barcelona fue justo vencedor, ante un Real Madrid que aguantó 35 minutos y que sufrió la aportación de varios jugadores, además de un 33% en triples por el 50% del rival. Esta claro que un Madrid Barcelona siempre interesa a muchos, que cualquier derrota que sufre el Real Madrid es comentada hasta la saciedad. Que en este equipo no vale el pasado ni el futuro, únicamente el presente. Pero como diría Pablo Laso tras ganar la novena, “disfrutemos un poco de lo conseguido”.