El Lasismo puede con todo

Día grande éste 2 de diciembre de 2021. Primero porque volvía el baloncesto al WiZink Center 11 días después de la victoria del Real Madrid ante el Coosur Real Betis. Segundo y más emotivo, porque se le recordaba a Pablo Laso sus 800 partidos como técnico del Real Madrid que, por cierto, ha sumado 619 victorias por 181 derrotas. Y finalmente porque el rival de anoche no era otro que el gran Maccabi Tel Aviv con sus 6 copas de Europa. Un Maccabi muy serio que ocupaba la séptima posición con 7-5 de balance, aunque con 4 de sus derrotas fuera de casa, pero capaz de haber sido uno de los dos equipos que batieron al FC Barcelona esta temporada. Liderados por el sempiterno Scottie Wilbekin, pero con el apoyo fenomenal de Ante Zizic con 12 puntos y 5 rebotes de media. Había rumores durante la semana del Real Madrid, de la posibilidad del regreso de todos los lesionados del equipo blanco, incluidos Trey Thompkins y Anthony Randolph. Pablo Laso decidió a última hora, apostar por los mismos 12 jugadores de las últimas convocatorias, cambiando a Juan Núñez por el recuperado Jeffery Taylor.

El entrenador vitoriano, decidió seguir dando descanso a sus dos americanos para partidos quizás menos exigentes. Tampoco estaba listo Carlos Alocén que sigue aquejado de problemas en la espalda. Por tanto, con la vuelta de Taylor, el Real Madrid recuperaba su quinteto tipo con Thomas Heurtel de base, Taylor y Hanga en las alas y la dupla Yabusele y Tavares en el juego interior. Fuerte comienzo del Real Madrid que empezaba a coger distancia gracias al trabajo de Guerschon Yabusele con 7 puntos sin fallo y liderar el dominio del Real Madrid hasta el 16-6 del minuto 5. Y es que los blancos salieron muy enchufados con los 5 puntos de Adam Hanga y las 3 asistencias de Thomas Heurtel. Y es que el Real Madrid llevaba una proyección de más de 120 puntos al final del partido, pero todo cambió cuando Robert Lottermoser señaló falta ofensiva a Edy Tavares lo que provocó un parcial de 2-10 para Maccabi en algo más de 3 minutos para llegar al final del primer cuarto con un ajustado 20-18 para el Real Madrid. Y es que el gran acierto madridista caducó en los últimos minutos del cuarto y Maccabi se aprovechó con puntos desde la zona con 7/11 de acierto y un Real Madrid que se vino abajo con 5 balones perdidos, aunque mantenía un buen 60% en tiros de campo. Pero la segunda unidad de jugadores del Real Madrid, solo aportaba con la canasta de Williams-Goss ante un Maccabi que terminaba el cuarto con un 0-6 de parcial en el último minuto.

Una segunda unidad madridista que no tuvo su mejor noche ayer y que vio neutralizada su ventaja adquirida en el primer tramo del partido. No solo en ataque, sino también en defensa porque Maccabi Tel Aviv supo enderezar el ritmo y recuperar la delantera en el marcador con un triple de Scottie Wilbekin que empezaba a calentarse con 7 puntos anotados en el segundo cuarto. Esto provocó un triple cambio en el Real Madrid a los 3 minutos del segundo cuarto con la salida de los 11 jugadores – excepto Vukcevic – y la dupla Tavares y Poirier para hacer frente a la dureza (deportiva por supuesto) del equipo macabeo. Con Llull de base y Rudy recuperando una posición “extraña” para él en esta temporada como es la de escolta. La intensidad de Maccabi subía grandes enteros y confianza en su juego que provocó el cerrojo al partido que se mantenía igualado hasta el 28-29 para Maccabi Tel Aviv en el minuto 15 de partido. No daba con la tecla Pablo Laso que veía como la dureza física del equipo israelí desesperaba a sus jugadores que la tomaban con el arbitraje esperando un trato de favor ante tantas manos de los jugadores de Maccabi Tel Aviv. Incluso una estadística “amiga” en el Real Madrid, no funcionaba en la noche de ayer. Apenas dos triples de nueve intentos había conseguido el Real Madrid en la primera parte, donde sorprendía, precisamente, los pocos intentos realizados por los de Laso. Y es que en la primera parte, solo Yabusele y Tavares apuntaban a más de 10 minutos jugados y donde no se daba con la tecla en el juego exterior. Y quizás por ello, el Real Madrid no pudo remontar el partido al final del segundo cuarto que se llegó con un 37-38 favorable a Maccabi Tel Aviv. Y es que el Real Madrid había sido claramente superado en lo físico por Maccabi y la segunda unidad blanca, apenas daba motivos esperanzadores para superar a un buen plantado equipo israelí.

Y con el merecido paso por vestuarios, se iba a iniciar la segunda parte con unos números muy idénticos entre los dos equipos, en rebotes asistencias y hasta en pérdidas de balón, lo que intuía que la pelea de Maccabi en la noche de ayer, iba muy en serio. Porque en el Real Madrid apenas Yabusele apuntaba a hacer un buen partido, mientras que al resto de jugadores, le costaba arrancar. Incluso en este tercer cuarto, donde vimos la excelente motivación del cuadro hebreo que protegía su zona ante la dupla interior Yabusele y Tavares que apenas aportaron 5 puntos entre ambos. Ni siquiera los bases madridistas, donde Heurtel iba de más a menos y Nigel Williams-Goss vuelve a pasar la inactividad y apenas aportaba 4 puntos en la primera mitad. A pesar de todo, el parcial era apenas de 6-6 en 5 minutos que dejaba un pobre marcador de 43-44 en el minuto 25, todavía para Maccabi Tel Aviv que tampoco encontraba a Scottie Wilbekin que se quedaba con 9 puntos y 3 asistencias al cierre del tercer cuarto. Y es que nadie en Maccabi había llegado a los 10 puntos en el partido a esas alturas del mismo. Y en eso seguía apareciendo Yabusele, sumando créditos de valoración con 17 tantos con sus 13 puntos y 5 rebotes en 23 minutos de juego. Aunque lo peor estaba por llegar, porque el jugador francés tuvo un golpe en el muslo izquierdo que le tuvo muchos minutos en el banquillo realizando bicicleta para no enfriar la zona. Solo un pequeño destello – y aviso – de Thomas Heurtel, pareció rehabilitar el juego del Real Madrid que se marchaba al final del tercer cuarto con un peligroso 50-59 favorable para Maccabi Tel Aviv. Y es que todo empezaba a ser muy negativo para el Real Madrid. Con un 41% en tiros de campo, un 17% en triples, solo 8 asistencias y lo más preocupante, la inferioridad plasmada y realista ante un Maccabi Tel Aviv que, sin mucho esfuerzo, se erigía como favorito a llevarse el partido.

Porque más allá de los 13 puntos de Yabusele, nadie había anotado más de 7 puntos en el Real Madrid. No funcionaba el triple (2/12) ni el tiro libre (4/8) y se temía por el físico de Abalde y Yabusele. El músculo de Maccabi Tel Aviv parecía que iba a decidir el partido y se encontraban convencidos de ello. Por tanto, sí la ofensiva del Real Madrid no funcionaba, deberían intentar frenar la competitividad macabea que llevaba 41 puntos anotados en los últimos 20 minutos jugados. Y como suele suceder en el WiZink Center, la magia del carácter blanco – aquí llamado Lasismo – debía aparecer para superar al rudo Maccabi Tel Aviv. Y el primer paso se estaba dando, Maccabi apenas anotaba 2 puntos en los tres primeros minutos del cuarto. El segundo paso, también. Y es que el Real Madrid iba anotando, a conta gotas, para seguir al acecho. Pero el tercer paso seguía sin aparecer y ya era un 2/16 en triples – 0 triples en la segunda parte – y el Real Madrid perdía oportunidades de igualar el partido. Solo Poirier mantenía con vida al equipo que mantenía a los suyos cerca, 58-65 para Maccabi en el minuto 35. Pero ahí cambió todo. El carácter madridista se inició con la salida de Heurtel y Yabusele a cancha y donde el base ex azulgrana decidió convertirse en el líder en pista de su equipo anotando los dos triples del Real Madrid en la segunda parte para conseguir una remontada espectacular de 10-2 en 4 minutos para colocar el 68-67 a falta de 72 segundos para acabar el partido. Maccabi ahora no anotaba y cometía hasta 7 pérdidas de balón en este cuarto y que apenas le permitía llegar 70-70 a falta de 14 segundos, gracias a un triple de Williams. Lo que pasó posteriormente, fue una asistencia más de Heurtel para la canasta final de Guerschon Yabusele que decidió el partido y la undécima victoria del Real Madrid en la Euroliga. No jugó bien el Real Madrid, pero porque no le dejó el músculo de Maccabi, pero el carácter del Real Madrid, lo supera todo. Guerschon Yabusele con 15 puntos, fue el mejor de los blancos igual que Heurtel con 15 puntos 5 rebotes y 5 asistencias. Ahora los blancos, se jugarán el liderato de la competición contra el FC Barcelona y a día de hoy, no sabemos lo que podrá pasar.

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