Golpe Real
El Real Madrid ha seguido con su buena racha y ha superado al FC Barcelona en la semifinal de la Final Four y se clasifica para su quinta final europea en los últimos diez años. Tras ir perdiendo hasta por 13 puntos, los blancos remontaron anotando 52 puntos en la segunda parte. Yabusele y Causeur anotaron 18 puntos, siendo una victoria de todo el equipo que deja al equipo de Pablo Laso muy cerca de conseguir la 11ª Copa de Europa, mañana contra Anadolu Efes.
El Real Madrid llegaba a la Final Four de la Euroliga quizá en el mejor momento de la temporada. Aterrizaba en Belgrado con la confianza que da tener 9 victorias consecutivas y un ritmo de juego altísimo que le permitía llegar a los 90 puntos y rozar los 100 de valoración en cada partido. Y la racha no es de los primeros meses de temporada, sino desde el 17 de abril, donde ya se están disputando los partidos más complicados de la temporada. Y ahora, en la Final Four, a los blancos no les importaba en demasía como llegaban sus rivales, solo le importaba competir y llegar con opciones al final. Y el destino fue caprichoso eligiendo al FC Barcelona como rival en semifinales. Subcampeón de Europa, líder de la liga regular y con cinco victorias en seis partidos – cinco consecutivas – sobre los blancos esta temporada. Eran claros favoritos y mantenían una carga de tener un proyecto fabricado para alzarse con el trofeo que rozaron la temporada pasada. El Real Madrid tenía una plantilla lo suficientemente fuerte para tener la Final Four como objetivo pero los meses de marzo y abril denotaron los peores momentos de la era Laso y que supuso todo un éxito aparecer en la tarde de ayer en Belgrado.
Y naturalmente, allí estaban todos disponibles – lesionados incluidos – para insuflar ánimos a los jugadores en cancha y poder batir de una vez esta temporada al todopoderoso FC Barcelona. Entre ellos, Rudy Fernández, que quiso competir y dedicar el partido a la memoria de su padre recientemente fallecido. Y cuando nos habíamos cansado de repetir el quinteto tipo del Real Madrid, Pablo Laso decidió hacer una modificación clave e inesperada para jugar ante uno de los equipos más físicos de Europa. Nigel Williams-Goss sería el base con Fabien Causeur y Adam Hanga en las alas y con Gabriel Deck y Guerschon Yabusele en el juego interior. Sorprendía la no presencia de Tavares y/o Poirier en el quinteto, aunque rápidamente las miradas se trasladaron al tobillo derecho de Nigel Williams-Goss que dejó el partido en el primer ataque madridista para no regresar jamás. Contratiempo en el equipo blanco que solo contaba con Sergio Llull en el puesto de base y debía contar con muchos minutos de Abalde y compañía para subir el balón. Y en un partido con tantas noticias extrañas, no nos dábamos cuenta de que Guerschon Yabusele salió como un tiro para anotar los 8 puntos del Real Madrid que en tres minutos ya se destacaba en el marcador, aunque el FC Barcelona, ni mucho menos, iba a permitir un arranque tan explosivo de los blancos. Precisamente el décimo punto de Yabusele colocaba el 8-14 para el Real Madrid en el minuto 5 de partido. Y aunque el Real Madrid ejecutaba una gran defensa vio como Mirotic y Brandon Davies aprovechaban su calidad para, con un parcial de 7-0, remontase el partido que terminó igualado gracias a los tiros libres para cerrar el primer cuarto 19-19, con 10 puntos de Yabusele y 7 de Nicola Mirotic. Por muy poco, el Real Madrid no lograba “su objetivo” de alcanzar los 20 puntos en un cuarto, pero volvió a sorprender con las 6 asistencias dadas junto a los dos tapones de Tavares, el robo de Llull y las cero pérdidas de balón.
Sin Williams-Goss, el base de la segunda unidad debía ser Abalde aún estando bien acompañado por Rudy y Hanga en las alas. Un 1-6 de parcial en el primer minuto del cuarto, nos dejó la primera sensación extraña con las 3 faltas personales señaladas a los blancos en dos minutos. No por el número de estas, sino por la selección de las mismas. Las faltas señaladas del Real Madrid fueron manos que buscaban balón o detener el avance del rival, mientras que en el lado blaugrana nos encontramos con que el contador de faltas subió a dos en el minuto 7 del cuarto, mientras provocaba a los blancos a no penetrar en sus ataques por las fieras manos que el FC Barcelona metía en la pintura. Así, casi sin darnos cuenta, el FC Barcelona reaccionó y nuevamente recuperó la ventaja en el marcador con un parcial de 8-0 roto por una bandeja de Tavares para el empate a 29-29 en el minuto 15 de partido. El tema arbitral era una excusa si, pero importante que luego comentaremos lo que provocó, pero tampoco el Real Madrid encontraba el camino a la canasta de FC Barcelona. Y es que, mientras mantenía un 50% en tiros dentro de la zona, el 1/8 en triples del segundo cuarto pareció reconocer al Real Madrid de antaño que huía de la batalla física en la zona y perdía los partidos en la obsesión desde la larga distancia. Al menos le quedaba su defensa al equipo madrileño que se mantenía en partido con un 7-4 de parcial en contra de un FC Barcelona que volvió a tener a dos exmadridistas como Laprovittola y Mirotic que anotaron 7 puntos cada uno para superar los 10 puntos anotados por ambos al descanso. Lógico el parcial de 9-1 en dos minutos que cerraba la primera parte con un peligroso 45-34 para el FC Barcelona. Y es que, mientras en Barcelona disfrutaban de un 4/7 en triples, el Real Madrid apenas hacía un 4/13 en toda la primera parte.
Los 15 puntos anotados por el Real Madrid en el segundo cuarto, distaba mucho de lo que los blancos han venido ofreciendo en su gran racha de 9 victorias consecutivas, aunque hay que recordar que el parcial fue +11 para el FC Barcelona, cuando lanzó hasta 9 tiros libres más que los blancos en el segundo cuarto. Pero empezaba un nuevo partido, con canasta de Sanli de salida el FC Barcelona dominaba 47-34 y quedaban 19 minutos donde el Real Madrid debía sudar sangre sudor y lágrimas si quisiese llevarse la victoria. Y lo intentó el equipo madridista con Abalde como base y añadiendo 5 puntos consecutivos hasta un parcial de 0-7 pero donde de nuevo Nikola Mirotic agachó las cabezas de los madridistas con un nuevo triple y colocar el 54-45 en el minuto 25 de partido. Parecía un esfuerzo inútil porque el FC Barcelona había detenido el parcial madridista. O eso pensábamos, porque los jugadores del Real Madrid alzaron filas y decidieron ejecutar una defensa exigente y presionante que sorprendió a los blaugranas y encendió los ánimos del Real Madrid que encontró en Fabien Causeur a su nuevo filón ofensivo y a su propio equipo creando un muro defensivo. Y como resumen, Fabien Causer anotaba 9 puntos en este tercer cuarto y 2 recuperaciones, para liderar un espectacular parcial de 2-15 en 5 minutos para reventar el partido y darle la victoria al Real Madrid 56-60 al final del tercer cuarto. Solo 11 puntos del FC Barcelona en el tercer cuarto, siendo una sola canasta de Brandon Davies en los últimos cinco minutos de cuarto y además perdiendo 5 balones en el tercer cuarto, por dos del Real Madrid que volvió a entrar en partido. Y que quede claro la “implicación arbitral”, +15 en el parcial para el Real Madrid, 0/0 tiros libres el FC Barcelona y 3/5 el Real Madrid.
Desde su defensa – 11 puntos recibidos – y su ataque – Causeur 9 puntos, Abalde 7 puntos – el Real Madrid entró de lleno en el partido y buscó romperlo en ataque pero sin descuidar su defensa. Y también encontró la combinación de ambos, y es que el Real Madrid lograba 7 rebotes ofensivos en la segunda parte que fueron muy positivos para conseguir segundas ventajas y mantenerse por delante en el marcador a pesar del enorme partido de Nikola Mirotic que terminó el partido con 26 puntos 12 rebotes y 39 de valoración. El último cuarto se convirtió en un toma y daca con canastas en ambos equipos hasta el 64-70 del minuto 35 de partido. El Barcelona no flojeaba y se agarraba a Mirotic para con 9 puntos en el cuarto amenazar la victoria merengue. Pero en el Real Madrid apareció otro factor, algo inesperado para muchos aficionados madridistas. Sergio Llull decidió tomar los mandos del equipo blanco y anotó otros 9 puntos sin necesidad de anotar un triple. Pero una semifinal europea tiene mucha importancia y Brandon Davies colocaba el 75-75 a falta de 150 segundos y lo que pasó quedará para la historia. 5 puntos consecutivos de Causeur colocaban el 75-80 a falta de dos minutos, dos canastas en un minuto colocaban el 79-80 para el Real Madrid en el minuto 39 y con un tapón de – el sexto del Real Madrid – de Poirier, el rebote – 14 en todo el partido -ofensivo de Deck y la bandeja de Llull colocaban un insuperable 79-82 para el Real Madrid a falta de 20 segundos, que los tiros libres sellaron hasta el 83-86 flnal que mete al Real Madrid en su 5ª final de Euroliga en los 10 años que Pablo Laso lleva entrenando al Real Madrid.
Guerschon Yabusele con 18 puntos y 7 rebotes fue el más valorado con 24, mientras que Fabien Causeur anotaba 18 puntos y 3 robos de balón para 18 de valoración. Y es que los blancos no consiguieron los 90 puntos y los 100 de valoración pero se quedaron cerca con los 86 puntos anotados y 95 de valoración. Mañana sábado, el Real Madrid dispondrá de otra oportunidad de conseguir su 11ª euroliga que además sería su 11ª victoria consecutiva, pero el rival no puede ser más peligroso, el Anadolu Efes – actual campeón – que derrotó en la primera semifinal a Olympiacos 74-77 con un triple sobre la bocina del genial Vasilije Micic.