Supercopa en Propiedad
El Real Madrid es campeón de la Supercopa. Por sexta vez consecutiva y con un balance de 12-0 en la competición. Es el tercer título de Chus Mateo (de 5 posibles) y el 25º en 12 años. Facundo Campazzo fue MVP tras conseguir 19 puntos y 5 asistencias, en un partido donde también brillaron Mario Hezonja, Dzanan Musa y Edy Tavares. Los blancos siguen cumpliendo sus objetivos.
Resulta familiar encontrarte en el mes de septiembre con un partido del Real Madrid jugando un título. Y las 5 últimas ocasiones el Real Madrid se alzaba con el título de la Supercopa Endesa. Ahora disputaba la sexta final consecutiva tras haber derrotado de forma clara al FC Barcelona en semifinales con un Facundo Campazzo descomunal. Y para la gran final, esperaba el Unicaja Málaga, campeón de Copa, que venció en la segunda semifinal al anfitrión UCAM Murcia. Los malagueños vienen en forma con un equipo muy parecido al de la temporada pasada y que tantas alegrías dio a su afición. El Real Madrid, pese a vencer al FC Barcelona en semifinales, sabía de la dureza que iba a tener el partido frente a Unicaja Málaga y aunque estuviésemos en principio de la temporada, debían subir su intensidad física para plantarle cara al cuadro andaluz. Y para esta final, en el Real Madrid causaba baja Gabriel Deck, por precaución por un golpe sufrido en el último cuarto en el partido de semifinales. En su lugar entraba Eli John NDiaye que además fue titular.
Abrimos el libro de la historia del Real Madrid para recordar que el equipo blanco lleva 11 victorias consecutivas y aspiraba a escribir su sexta supercopa consecutiva, la décima en total. Es el quinto título que disputa Chus Mateo que aspiraba a conseguir su tercer título conseguido en dos años. Facu Campazzo, Dzanan Musa, Mario Hezonja, Eli NDiaye y Edy Tavares, formaron el quinteto inicial del Real Madrid para la gran final. Se esperaba la salida brutal de Unicaja Málaga buscando sacar de la zona a Tavares y anotar desde fuera. Y es que, tras 3 minutos, 9 de los 11 primeros puntos de Unicaja Málaga llegaron desde el triple de Kendrick Perry. El Real Madrid aguantaba el aguacero con la absorción de balón de Dzanan Musa y Mario Hezonja. El croata, muy desacertado el sábado, anotaba 7 puntos y robaba 2 balones en el primer cuarto. Tampoco se quedó corto Dzanan Musa quien sumaba 9 puntos para igualar el encuentro 11-11 en el minuto 5 de partido. A partir de ese minuto, la aportación ofensiva de Unicaja fue descendiendo con un 0/7 en triples mientras que en el Real Madrid solo Tavares y Yabusele aportaban punto alguno más a lo conseguido por los balcánicos. Pudo aportar más los blancos a no ser por culpa del 2/9 en tiros libres que empezaba a preocupar a Chus Mateo. Por tanto, no cambiaría mucho el marcador, algo bueno para el Real Madrid puesto que el pozo ofensivo malagueño se había detenido. Un 38% de acierto de Unicaja Málaga en el primer cuarto por un 50% del Real Madrid que metió la directa en los tres últimos minutos para lograr un parcial de 2-7 y llevarse el primer cuarto por 17-21 con 16 puntos entre Musa y Hezonja. Otra nota positiva del Real Madrid proviene de las 6 recuperaciones de balón, el mismo número de pérdidas que tuvo el Unicaja Málaga.
Buenas sensaciones del Real Madrid en números pero que seguía manteniendo un resultado bastante abierto y que consideraba insuficientes, de momento, las situaciones producidas en los primeros diez minutos de partido. Y más problemas en el Real Madrid cuando en apenas 3 minutos, Vincent Poirier cometía tres faltas personales y complicaba la rotación interior del conjunto madridista. Curiosamente, sin “los brates” en cancha, el Real Madrid continuaba anotando con fluidez en el segundo cuarto provocando siete faltas en el Real Madrid y nueve lanzamientos libres del Unicaja Málaga en el segundo cuarto. Fue el mayor poder ofensivo de los verdes para la consecución de puntos. Tanto que el Real Madrid conseguía la máxima diferencia 25-34 en el minuto 15 de partido con un palmeo de NDiaye justo en la vuelta de Facundo Campazzo a cancha. Cuando más se embarraba el partido, con los jugadores de Unicaja Málaga buscando sacar del partido a Edy Tavares, apareció el pequeño argentino para domar de nuevo el partido. Tan solo necesito poco más de dos minutos para dejar su sello en el madridismo si es que, en algún momento, se hubiese perdido. Y es que Campazzo anotaba sus 8 primeros puntos del partido precisamente en ese periodo para apoyar el cuarto perfecto de su equipo y cerrar la primera parte con la máxima ventaja del partido con el 31-44 para el Real Madrid al final de la primera parte. Y es que fue un parcial de 14-23 para los blancos que mantenía un 56% en tiros de campo ante un Unicaja Málaga que se desangraba en el triple con un 3/16 en la primera parte. El Real Madrid minaba las energías de Unicaja Málaga después de conseguir un 63% en tiros de campo en el segundo cuarto.
La ventaja era importante, el Real Madrid mejoró mucho su juego respecto al partido de semifinales y se manejaba tranquilo en un partido controlado por Mario Hezonja, Dzanan Musa y por supuesto, Facundo Campazzo. Pero el Unicaja Málaga de Ibón Navarro es un equipo especialista en pelear los partidos hasta el final, de volver al barro una y otra vez y de conseguir parciales increíbles. Pocos esperábamos que Will Thomas a sus 37 años fuese capaz de meter en problemas al Real Madrid durante el tercer cuarto y voltear el porcentaje malagueño y sobretodo, el resultado del partido. Con Mario Hezonja – 5 puntos en dos minutos – desatado, el Real Madrid pareció romper el partido, pero fue una quimera porque los malagueños avisaban con 10 puntos anotados en tres minutos (tras anotar 31 en 20 minutos). Asi, con canasta en cada ataque de Unicaja, nos encontrábamos en un parcial de 14-6 para Unicaja Málaga que colocaba el 45-51 en el minuto 25 todavía para el Real Madrid. Y el problema del Real Madrid no era tanto el acierto ofensivo sino las 7 pérdidas de balón de los blancos en este tercer cuarto junto al típico ya 1/9 en triples. Y mientras seguíamos buscando explicaciones, buscando puntos más allá de Hezonja, el Unicaja Málaga seguía hurgando en la herida y resoplando en la nuca del Real Madrid con el 56-54 en el minuto 29, es decir, parcial de 22-10 para Unicaja Málaga que hizo volver a rugir a sus aficionados. Será anécdota para muchos, pero justo en ese minuto, apareció en cancha Sergio Llull y el partido cambió de nuevo. De primeras hubo un 0-7 de parcial con el séptimo punto de Tavares en este cuarto que dejaba el resultado en 56-61 para el Real Madrid al final del tercer cuarto. Un cuarto con apenas un 38% de acierto en el Real Madrid y que ya había comprobado que Unicaja Málaga no daba el partido por perdido.
Por eso volvíamos al principio, donde el Real Madrid dominaba con el talento y calidad de sus jugadores. Pero con un rival que buscaba de nuevo el barro y la brea para sacar del partido a su rival y volver a comandar el partido. Y lo conseguía sacando sus armas con Osetkowski y Perry para volver a mandar en el marcador 65-64 minuto 32. Y de ahí que apareció Vincent Poirier para dar descanso a Tavares para intentar remontar el partido. Un partido que empezaba a tener controlado Unicaja Málaga con un 13-7 en apenas 3 minutos. Y el Real Madrid despertó con un 0-9 de parcial que colocaba de nuevo al Real Madrid líder y estirando la diferencia hasta el 69-75 en el minuto 35 de partido. Y cuando esperábamos ver de nuevo en cancha a “los titulares”, tanto Llull como Poirier decidieron ponerse manos a la obra y detener la enésima rebelión malagueña que solo pudo parar a los blancos en faltas personales que esta vez, los blancos supieron amarrar para terminar ganando el partido 81-88 con 9 puntos de Poirier en este último cuarto. Un nuevo título para el Real Madrid, para Chus Mateo (su tercero de cinco posibles) y un nuevo MVP para Facundo Campazzo que realizaba 19 puntos y 5 asistencias. Mario Hezonja 17 puntos 5 rebotes, Dzanan Musa 13 puntos 5 rebotes 3 asistencias y Edy Tavares con 12 puntos y 11 rebotes, superaron la decena de puntos en el partido. Es la sexta Supercopa consecutiva del Real Madrid y el título número 25 (de 49 posibles) en 12 años. Siempre un título por temporada. Así que la temporada que acaba de comenzar ya tiene premio aunque lo mejor, seguro que está por llegar.