Pablo Muñoz vuelve a rescatar al Rayo Vallecano
Dos chispazos del 10 vallecano volvieron a sacar los tres puntos en un encuentro marcado por la gran igualdad que existió entre los dos conjuntos.
Cuando un equipo está con confianza le sale todo. Hasta los malos partidos pueden convertirse en buenos si aprovechas un error del rival o ejecutas a la perfección una jugada a balón parado. El Rayo Vallecano de Iván Amaya está en uno de esos momentos de la temporada en el que todo le sale bien. Los vallecanos volvieron a sumar los tres puntos ante un Gimnástica Segoviana que lo dio todo durante los noventa minutos, aunque sin premio final y con la sensación de haber desaprovechado una buena oportunidad de puntuar en Madrid.
La lluvia fue la gran protagonista del encuentro. Bajo un diluvio comenzaba un partido en el que ambos conjuntos salían con su alineación de gala. Los primeros minutos sirvieron para ver quién se hacía con el mando del juego y, aunque apenas hubo ocasiones durante el primer tramo, la línea adelantada que ubicaban los segovianos en el campo obligaba a los vallecanos a buscar alternativas más directas en el juego para hacer daño a sus rivales. Pablo Muñoz y Torres se movían muy bien entre líneas buscando resquicios en la defensa visitante, pero la gran solidez mostrada por la Gimnástica durante todo el primer tiempo no les permitió estar cómodos a la hora de lanzar al Rayo al ataque.
A medida que iba avanzando el encuentro la Gimnástica fue igualando las fuerzas y comenzó a acercarse a la portería de Benedi. El portero franjirrojo fue el salvador de su equipo en la primera mitad al realizar dos grandes intervenciones de nivel a Alexis y a Mario Serrano para sostener el 0-0 antes del descanso.
El paso por el túnel de vestuarios sirvió para que Amaya introdujera en el campo a Hugo y Morcillo en busca de más movilidad en ataque. El Rayo Vallecano salió con más energía, pero tampoco mostraba la lucidez que había tenido en ataque en las jornadas anteriores. Pero todo eso cambió en el minuto 64. Una jugada sin aparente peligro se acabó convirtiendo en un regalo para los franjirrojos. A Alfonso se le escapó de las manos el balón y Pablo Muñoz le robó el balón y marcó el primero para el Rayo Vallecano.
El gol enfrió a los segovianos, que apenas tuvieron tiempo para reaccionar y darle la vuelta a la situación. El partido lo volvió a decidir Pablo Muñoz, esta vez para regalarle una bonita asistencia a Hugo picándole un balón que le dejó prácticamente solo ante el portero. El centrocampista solventó muy bien la jugada con una bonita vaselina que puso el definitivo 2-0 en el electrónico.
Los franjirrojos siguen con las buenas sensaciones mostradas en este inicio de campaña y se colocan en segunda posición con doce puntos. Por su parte, la Gimnástica Segoviana sigue sin conocer la victoria esta temporada y sigue en puestos de descenso con un punto en su casillero.
Ficha Técnica
