Un problema de goles
La Peña, tras ocho jornadas, tiene la peor diferencia de goles entre los siete grupos de la División de Honor Juvenil.
La temporada del único representante leonés en la máxima categoría del fútbol formativo juvenil no está siendo la esperada. Tras la marcha de Adrián Benavides, el CDF Peña parece no levantar cabeza y sigue sin conocer el triunfo. Esta circunstancia llevó a Jorge Merayo, el técnico que inició la campaña, a echarse a un lado tras los malos resultados y las negativas sensaciones. Con Miguel Ángel Álvarez Tomé consiguieron el primer punto, aunque el equipo peñista sigue teniendo un grave problema en las dos áreas.
Un rápido vistazo a los siete grupos que componen esta División de Honor Juvenil basta para comprobar el horrible inicio del cuadro leonés. Con una diferencia de -26, el CDF Peña es, sin paliativos, el peor equipo en cuanto a goles anotados y recibidos. El que más se acerca a las cifras del conjunto peñista es otro colista de la categoría como es la UD Logroñés con -19. Unos números que han provocado que solamente se haya podido celebrar un único punto en lo que va de competición.
Miguel Ángel Álvarez Tomé tiene ante sí un grave problema en las dos áreas. Su equipo solamente ha sido capaz de hacer cuatro tantos en lo que va de temporada y las cifras son muy pobres. Tanto es así, que tres de estos goles llegaron en un mismo partido en el que la Peña consiguió sumar un punto en su feudo. Y es que el Área Deportiva de Puente Castro es el único escenario en el que el cuadro leonés ha podido celebrar un tanto. El otro llegó ante el Alcobendas Levitt en la derrota 1-3 frente a los madrileños. Empezar a ver puerta resultará fundamental para salir del farolillo rojo.
Pero aquí no acaban los problemas del CDF Peña. Con el 3-0 encajado el pasado domingo en el Sancti Spiritu ya ha recibido en ocho encuentros un total de 26 tantos. Algo más de tres por encuentro, lo que dificulta en gran medida el poder sacar puntos. La zaga parece la zona más endeble de un equipo que no es capaz de mostrarse sólido y seguro en defensa. En todo ello trabaja Miguel Ángel Álvarez Tomé, pero el tiempo apremia cuando se acerca el fin del primer tercio de competición.
