Aviso Contundente
Severa derrota del Real Madrid ante un enorme Valencia basket que superó en todo momento a un equipo blanco que volvió a quedarse huerfano más alla de Tavares - 15 puntos 7 rebotes - y Facundo Campazzo - 14 puntos 4 rebotes 3 asistencias - y solo anotan 53 puntos en 30 minutos. Segunda derrota consecutiva del Real Madrid en Euroliga, que preocupa por la falta de competitividad y por la sentencia de Pablo Laso: "Quien quiera ir por su cuenta, no jugará conmigo".
Noche dura en el estreno europeo del Real Madrid en el WiZink Center. El ya desolador y triste aspecto que presentaba el vacío Palacio madrileño, se solapaba con la triste imagen ofrecida por el Real Madrid en su partido contra Valencia Basket. Los partidos se ganan o se pierden, pero anoche confluyeron un equipo con ilusión y motivación de dar la sorpresa este año, con la desgana y la escasa competitividad mostrada por el equipo de Pablo Laso en uno de los peores partidos de su época que se pueden llegar a contar con los dedos de una mano. Es lógico que estas cosas ocurran y en el caso del Real Madrid, suceden de tarde en tarde y como suele ocurrir siempre, nadie se lo espera. Y si ya hay “run run” cuando el equipo gana y consigue títulos, imaginaos cuando se pierde y de la manera tan contundente como la pasada noche ante un Valencia Basket que se ha ganado de golpe muchos boletos para ser la gran revelación de la Euroliga esta temporada.
Porque Valencia Basket fue superior al Real Madrid en todo. Al Real Madrid actual, no nos equivoquemos. Actual campeón de Copa del Rey y Supercopa y que afrontaba la Euroliga la temporada pasada con grandes aspiraciones de volver a una Final Four. Pero los taronjas se han reforzado de maravilla con gente de la calidad de Kalinic – 10 puntos 8 rebotes anoche – Derrick Williams y el ex madridista Klemen Prepelic. Pero el Real Madrid no le iba a la zaga y empezó de inicio con Campazzo, Deck, Abalde, Garuba y Tavares, un equipo muy alto para pelear con el peligroso juego ofensivo valenciano. Y también defensivo, hasta 4 pérdidas de balón tuvo el Real Madrid en apenas dos minutos gracias también a la brillante presión defensiva provocada por los levantinos. Sin embargo, el partido fue igualado en parte a la magnífica defensa blanca que aportaba 4 tapones – 3 de Garuba – para mantener al Real Madrid por delante 12-10 minuto 5. El Real Madrid pudo correr de la mano de Campazzo que volvió a brillar en el inicio del partido consiguiendo 8 puntos en el primer cuarto. Los blancos mantenían un 50% de acierto en el tiro y se mostraron superiores aunque solo fuese por estos primeros diez minutos. Pero Valencia Basket no se rindió y con Kalinic y Dubjlevic como arietes, se marcharon al final del primer cuarto a tiro 19-17 del Real Madrid. Un Valencia Basket no muy acertado en el tiro 41% en tiros de campo, pero que ya había recuperado hasta 5 balones y no le perdía la cara al encuentro.
El lavado de cara del anterior partido de Vitoria, parecía que iba por buen camino puesto que la segunda unidad madridista apretaba también los dientes y con la nueva aportación de Tavares, los blancos se escapaban en el marcador hasta el 29-22 del minuto 13 de partido. Hasta ahí, el momento feliz de un Real Madrid que fue una auténtica sombra en el resto del partido. Como de un interruptor se tratase, el equipo de Pablo Laso se fue apagando por completo y apenas opuso oposición ante un gigante Valencia Basket que se vio beneficiado por la frustración blanca con los errores en el triple y las faltas cometidas. Pero es que además, Valencia Basket hizo uno de esos partidos para recordar consiguiendo remontar el partido hasta el 32-34 del minuto 16. Ni siquiera la vuelta de Facundo Campazzo aliviaba el juego del Real Madrid que se encontró con un acertadísimo Bolan Dubjlevic en el triple – 2/2 este cuarto, 4/6 en la primera parte – para anotar 14 puntos en la primera parte y dibujar un peligroso 34-42 minuto 19. La velocidad de Campazzo y la habilidad de Tavares, de lo único salvable del partido de anoche, maquillaron el resultado al descanso con 39-44 para el Valencia Basket. Y es que precisamente el argentino y el caboverdiano eran anotaron 21 de los 39 puntos anotados en la primera parte por el Real Madrid que volvía a verse huérfano en la anotación a pesar de mantener un 53% en tiros de campo y mantener unas estadísticas igualadas con Valencia Basket.
Pero la segunda parte no cambió la inercia del final del segundo cuarto y se comprobó en las primeras acciones del encuentro. Triple liberado de Dubjlevic, canasta imposible de Prepelic y acto de voluntad y fuerza con Williams “en su chepa” de Usman Garuba. Todo esto en apenas dos minutos dibujaba un ritmo desalentador y preocupante para el Real Madrid que se encontraba 41-52 en el minuto 22. Ni siquiera las acciones particulares de Gaby Deck 1/5 en tiros pudieron solventar la situación, que esta vez los titulares no supieron voltear. No podemos diagnosticar una bajada de brazos, pero sí un cúmulo de gestos de impotencia en los blancos ante un Valencia Basket qué, además de anotar por encima del 50%, se divertía y jugaba un baloncesto sencillo y elegante para el ojo del espectador. Mientras, los puntos del Real Madrid llegaban por cuenta gotas y con duros correctivos valencianos de 8-15 en 5 minutos que colocaban a Valencia Basket por encima de la decena de diferencia donde los blancos seguían desquiciados ante el desacierto ofensivo y las facilidades que encontraban los valencianos en traspasar la zona madridista. El 0/7 en triples del Real Madrid y el 14-24 de parcial en este cuarto, terminó por rematar un partido que hizo mucho daño a los blancos que llegaron con su mayor desventaja al final del tercer cuarto 53-68. El dolor era intenso y se notaba en el campo. Escocía más el 5/17 en tiros del Real Madrid en este cuarto, que el fantástico 8/16 de Valencia Basket en el mismo.
Para un equipo abonado a las grandes gestas de remontadas y de carácter, el -15 al final del tercer cuarto empezaba a parecerse como un mal menor a un partido que se volvió a tirar, como en Vitoria la pasada semana, en la segunda parte. Y no parecía que en los diez minutos finales, el Real Madrid pudiese solventar el partido. Ni siquiera esperar una férrea e intensa defensa presionante para provocar pocos puntos del rival. Encima el parcial también fue negativo y el Valencia Basket volvió a anotar 25 puntos cuando ya tenían su trabajo hecho. Y dieron todo un golpe de autoridad, el Real Madrid se lo puso fácil sí, pero la grandeza de este nuevo Valencia Basket 2021, promete durar años. En cambio, la derrota del Real Madrid, no se puede considerar como una más. No importa perder, ni tampoco importa llevar 0-2 en una competición que aspiras a ganar. Pero como avisábamos al comienzo, estas derrotas duelen mucho más que otras y son usadas para atacar al equipo de una manera mucho más dramática de la habitual. Pero no hay tiempo de lamentaciones y es momento de tirar todos a una, como dice Pablo Laso: “ La Euroliga no está empezando, ya lo ha hecho. Y si alguno prefiere ir por libre, no jugará conmigo”, claras intenciones a que se gana juntos, se pierde juntos y se remonta todos juntos y unidos.